LA FALANGE MACEDÓNICA. Revolución en la táctica militar. Ascenso al poder de FILIPO II.
La ascensión al poder de Filipo II coincidió con una revolución de la táctica militar y del armamento que puso fin al dominio hoplita.
Al introducir estos cambios en Macedonia, Filipo II logró un muy poco tiempo, convertir al país en una de las principales potencias militares del sudoeste de Europa.
Una de las principales innovaciones fue la reorganización de la infantería. Filipo creó una nueva falange. Cada soldado llevaba un casco de metal, un pequeño escudo y una espada corta. Su principal arma era una enorme lanza (sarissa) de hasta cinco metros de largo. Esta nueva incorporación permitía al falangista atacar de golpe antes que el enemigo se pudiera acercar.
También tuvo un importante aumento del número de hombres, la técnica y la disciplina de los combatientes y las mejoras de las relaciones internas en el ejército dotaron a Filipo y a Macedonia la estabilidad y la fuerza necesaria para forjar los primeros pasos de uno de los mayores imperios de la Antigüedad.
Otro de los factores importantes fue el fortalecimiento de los lazos que unían al ejército con sus comandantes y su propio rey. (Filipo compartió las dificultades y peligro al que se enfrentaban sus hombres, tanto que perdió un ojo).
Introdujo además importantes cambios en los lazos con la nobleza, creando nuevas instituciones.
Estas y otras reformas y su impecable diplomacia permitieron a Filipo II lograr lo que ningún otro rey de Macedonia había logrado; crear una base amplia y leal de apoyo, y luego de la batalla de Queronea lograr la dominación de Grecia.
Bibliografía:
POMEROY, S. [et.al.] (2012): La antigua Grecia. Historia política, social y cultural. Crítica, Barcelona.
https://historiaeweb.com/2019/01/28/falange-macedonia/
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